Los contenedores IBC son adecuados para almacenar una variedad de productos químicos. Mejora las áreas de trabajo, las operaciones y el manejo de estas sustancias con los contenedores correctos.
Los contenedores IBC son adecuados para almacenar una variedad de productos químicos. Mejora las áreas de trabajo, las operaciones y el manejo de estas sustancias con los contenedores correctos.
Si trabajas con químicos, sabes que el almacenamiento y el transporte son un tema delicado, no puedes usar cualquier recipiente, primero hay que pensar en la seguridad, resistencia y eficiencia. Por ello, los contenedores IBC son la solución que la mayoría de la industria química prefiere, por su estructura resistente y adecuada para almacenes o plantas. A continuación te mostramos tres grandes beneficios que los contenedores IBC ofrecen.
Cuando se manejan químicos, la prevención de fugas es prioridad y los contenedores tienen mucho que ver para evitarlas. Los IBC están diseñados para minimizar el riesgo, por su estructura robusta y el tanque protegido por una rejilla de acero, lo que le brinda una protección doble ante golpes.
Además, el diseño permite que los contenedores IBC se llenen y vacíen por válvulas y tapas selladas que reducen la exposición a los químicos. Esto no solo protege el material, sino que también cuida el personal que los manipula, lo cual es vital para cumplir con las normas de seguridad y evitar accidentes costosos.
Una de las ventajas más grandes de los contenedores IBC es su forma, a diferencia de otros tipos de contenedores, como los tambos cilíndricos, el diseño cúbico aprovecha cada centímetro de espacio. Puedes apilar varios contenedores IBC de forma segura, usando la altura del almacén o bodega de manera mucho más eficiente.
Piensa en los contenedores IBC de 1000 litros que pueden ocupar la misma superficie que cuatro tambos de 200 litros, estás almacenado más volumen en el mismo lugar. Esto se traduce directamente en menos renta de espacio, mejor organización del inventario y una logística más fluida para tu negocio.
Los contenedores IBC están fabricados con plásticos de alta densidad, como el polietileno, son altamente resistentes a la corrosión que causan la mayoría de los ácidos, bases y solventes industriales. La resistencia química asegura que el contenedor no se degrade con el tiempo, manteniendo el producto químico puro y seguro.
Además de ser resistentes, los contenedores IBC están hechos para ser reutilizados, su durabilidad les permite tener múltiples ciclos de vida, lo que reduce los costos de compra a largo plazo. Muchos de estos contenedores pueden ser limpiados y reacondicionados profesionalmente para seguir usándose.
Si buscas una solución de almacenamiento químico que combine seguridad, eficiencia y ahorro, los contenedores IBC son la mejor opción. Encuentra contenedores IBC aquí y cotiza cualquiera de tus proyectos.